el inmundial

Hace tiempo que decidí no creer nada de lo que saliera en la pantalla chica, no creer en las imágenes enlatadas, ni menos creer lo que querían que yo viera. He estado en programas en vivo, tanto en la preproducción como en la difusión; todo esta programado, no hay sino falsa espontaneidad. He sido grabado, mis dichos tergiversados. Desde entonces sé que la única tele buena es la q esta apagada o en su defecto sirve de acuario o de mesita.
Debo creer entonces en este gran espectáculo de la Fraternidad que supuestamente representa el campeonato mundial de la FIFA. Asociación no menos turbia de intereses semi-ilicitos. Basta con mirar a sus dirigentes(disculpen, pero no me cae bien señores). No son unas aldeitas construidas para paliar la falta de escrúpulos que cambiaran mi parecer. Es todo una farsa, lo comprobé cuando ganó Francia, en que se privilegia, ¡que extraño!, las ganancias, la búsqueda de beneficios. Ganan los grandes, que más público con mayor poder adquisitivo atraen, pierde, para variar, el tercer mundo... sin mencionar a Africa nuestro continente olvidado.
Es cierto que ante los partidos me emociono, caígo en la tentación nacionalista y creo asistir a un espectáculo dónde prima el deporte. Las olympiadas modernas, el arte de canalizar las pulsiones belicosas de las naciones en un sano enfrentamiento. Pero de ser así, ¿porqué no participan todos los países? como me lo preguntó mi primita, aunque deba durar 2 meses. Basta ver los auspiciadores, comida chatarra, servicios truchos, la economía de cafiches (la prostitución engendrada para este mundial ha sido horrorosa). Sin hacer mención que durante un mes sólo se habla de eso en todos lados, bueno para ser franco entre eso y las cosas que "los medios serios" hablan de costumbre, en realidad no hay de qué asombrarse....